Jamás en
veinticuatro escasas horas se vieron tantas odas a la infamia y al
mal gusto desde diferentes grupos de gobierno en una sola ciudad. Aún
no me explico como Madrid no implosionó ante tanto payaso haciendo
el circo a la vez, aunque supongo que fue porque la solidaridad de
las marchas de apoyo a los mineros, y la presencia de los mineros en
sí le dieron a la capital las fuerzas que necesitaba para soportar
tanto impresentable junto bajo el mismo cielo.
Mientras
las marchas obreras pedían sus derechos y eran REPRESALIADAS -si,
como en la tele, aquí también tenemos lo nuestro- Mariano y sus
secuaces estaban presentando no solo recortes, sino mentiras
programáticas. Aquí el programa y el papel higiénico parecen ser
tres cuartos de lo mismo, será que con la subida del IVA les sale
más barato usar el primero.
Cuánto
me gustaría que me contara el presidente -con minúsculas- qué le
parece el estar haciendo lo contrario de lo que prometió a bombo y
platillo. Con todo lo que se llena la boca hablando de sus votantes,
apoyos y amplia -y cuestionable- mayoría absoluta, y sin embargo se
le olvida que esa gente que le votó lo hizo con un programa concreto
que no está cumpliendo. No es mi intención injuriar a nadie, pero
mentiroso es el que miente. Y no es que me importen demasiado los
votantes del PP, sinceramente y con todos mis respetos, pertenecemos
a universos diferentes, pero ya que se la pela la gente que no le ha
votado -que son más entre votantes y abstenciones de los que lo
hicieron- al menos que responda ante los que si lo hicieron, pero no.
Aquí lo de dar explicaciones no se estila.
Es
curioso ver el pleno del Congreso cuando un partido tiene mayoría
absoluta. Yo ayer lo hice, me lo tragué y oigan, contra todo
pronóstico no me dormí ni me arranqué los pelos en un ejercicio de
paciencia infinita. Para ilustraros un poquito más de lo que lo
hacen los trozos sesgados del telediario, os cuento: a Rajoy y su
equipo -la selección no, el de gobierno- se le presentan
alternativas varias a los recortes presentados por varios grupos
parlamentarios: Cayo Lara ayer proponía gravar a las rentas más
altas, para las que no ha habido ni un solo recorte, o al patrimonio,
o a la Iglesia, Casa Real, Defensa... Así mismo Rosa Díez hablaba
de que no se está persiguiendo el fraude fiscal y que la amnistía
en este campo cada vez es mayor. Varios representantes le habían
hecho al gobierno llegar propuestas basadas en principios de cierta
lógica desde mi punto de vista, pero la cuestión no es que le
lleguen, sino la altanería con que los ignora.
El
presidente arregla toda réplica diciendo básicamente: “respeto
mucho sus propuestas pero no las comparto. Y punto”. ¿Significa la
mayoría parlamentaria que puedes pasarte por el arco del triunfo sin
el más mínimo debate las propuestas de personas que representan a
otras miles de personas? ¿No es la Democracia ese sistema que nació
del Pueblo unido en la plaza debatiendo sus problemas, razonando y
llegando a acuerdos mediante puntos en común? Efectivamente eso es
la Democracia. Lo que sea esto que tenemos ni se acerca, cada uno le
puede poner la etiqueta que quiera, yo la voy a llamar Dictadura de
la Desvergüenza, porque ya ni los modos cuidan.
El líder
de Izquierda Unida, por cierto, habló al pleno con la camiseta en
apoyo a la marcha minera, y le pidió formal y públicamente a Rajoy
que se cesara inmediatamente a la persona que había autorizado las
cargas policiales que estaban teniendo lugar simultáneamente en la
Castellana. En el turno de respuesta del presidente, no hubo
respuesta a tal réplica. Lo que dijo Lara en nombre de las personas
que estaban siendo golpeadas, detenidas y disparadas con pelotas de
goma, pasó por la cabeza de Rajoy sin pena ni gloria. Ni la más
mínima mención, como si no hubiera oído nada. Tal es su
prepotencia.
Los
parlamentarios populares, al loro: aplaudieron mientras su presidente
anunciaba los recortes. Estaba curioso ver como el tipo hablaba de
una subida del IVA del 18 al 21%”, una reducción de la prestación
por desempleo, una supresión de la paga extra de navidad al
funcionariado... y los demás aplaudían. ¿Qué aplaudían? ¿Por
qué estaban tan contentos? ¿Quizás porque de nuevo sus culos
oligarcas quedaban bien a salvo? ¿Se creen con derecho de reírse de
esa forma de quienes pagamos una y otra vez todos sus pufos?. Dijeron
que eran aplausos de apoyo a su líder, yo creo que eran aplausos
equivalentes a las risas de las hienas. Cada cual saque sus
conclusiones.
Una vez
más echaron a los perros del poder con sus mandíbulas afiladas y
sus números de placa tapados, bien surtidos de pelotas de goma -una
partida en la que no hubo recortes en el presupuesto general, ahora
vemos el porqué- a represaliar a los cientos de miles de
manifestantes que apoyaban a los mineros en su llegada a Madrid y sus
últimas etapas por los lugares clave del destrozo de sus acuerdos.
Esperanza Aguirre, que es una tía muy ingeniosa, tenía ayer el día
tontorrón y se mofaba del seguimiento “modesto” de la marcha
porque había oído que la había apoyado unas 20.000 personas.
Cientos de miles, Esperanza, y 500 autobuses desde las provincias.
Ella cumplía su papel, claro. Dijo la tontería de la jornada para
estar en los medios por otra cuestión que no fuera la de que ella
hizo a título personal campaña contra la primera subida del IVA de
Zapatero, instigando incluso a la rebelión contra dicha medida. Ayer
el que estaba en el candelero era su compinche y cuanto menos
recordásemos su hazaña, tanto mejor. Está todo estudiado.
Ayer
dieron dos buenos nuevos hachazos a la clase trabajadora: los
recortes y la represión en un mismo día. Se han superado, aunque no
les perdáis de vista que aún pueden romper el molde, esto es como aquel dibujo animado que decía al final de sus episodios “no se vayan
todavía, aún hay más”. Ellos solos se desenmascaran. No están
con el español medio, están con los ricos, con los poderosos, con
el status quo de clases que se atreven a negar mientras lo agudizan
con sus medidas que condenan a la miseria a la clase trabajadora
mientras que blindan sus privilegios. No tienen vergüenza ni la
conocen.
El circo
de las hienas, sus aplausos, sus chascarrillos malos, su prepotencia,
sus imposiciones dictatoriales, tienen que acabarse sea como sea. Que
nadie se crea el cuento de que todo éste esfuerzo sirve para algo,
lo primero porque ya no es un esfuerzo, es una condena lo que nos
imponen para que Europa siga haciendo el agosto, y ellos
especialmente.
Yo no
quiero salir de la crisis por el camino de Rajoy, quiero salir por el
camino de la lucha obrera, y quiero que lo hagamos con nuestros
medios y herramientas. No necesito una España de nuevo consumista,
alienada, aletargada otra vez. No necesito volver al tren de vida
anterior a la crisis que es a donde parece que quieren hacernos creer
que volveremos. Yo quiero un país nuevo de Españoles con conciencia
de clase y que trabajen por el bien de la mayoría, que sean
solidarios y que permanezcan despiertos como lo están ahora mismo.
Que podamos o no tener dos mercedes es algo que me la trae al fresco.
Solo quiero vivir, trabajar para ello, estudiar, que tengamos
seguridad en la vejez y estímulos intelectuales en la juventud, que
nuestra sanidad esté asegurada... ah, y si no es mucho pedir,
también me gustaría que los gobernantes de la nueva era no se rían
en nuestra cara como lo hacen estos humoristas de tres al cuarto.
Supongo que a día de hoy eso es mucho pedir pero oye, mañana será
otro día, y tendremos que hacer que sea el nuestro. En nuestras
manos está trabajar comprometidos con lo que es nuestro futuro y el
de tantos y tantos ciudadanos que se lo merecen o van a merecérselo.
Bonita
semana (lo que queda de ella)
Alba
Sánchez.
Alba voy a reiterar lo que muchas veces te he dicho sobre otros muchos comentario tuyos y que comparto totamente, pero todo esto que nos está pasando, y con la desvergüenza que lo hacen, creo que nos está bien empleado, y aunque no lo comparto, por supuesto, pero ahora me gustaria ver la cara de todos estos "infelices" que fueron con su votito del PP a introducirlo en la urna, con la creencia en todo aquello que decian, incluso algunos sin saber porque, solo porque algunos decian que con el PP se iban a solucionar lor problemas de los pobres y de los trabajadores, pero Dios mio, como se puede ser tan incautos, cuando se ha visto que la politica de derechas beneficien a los menos pudientes.
ResponderEliminarY con esto no quiero decir que Zapatero y sus amigos lo estuvieran haciendo bien, por supuesto que no, que pensaban que reuniendo a los ladrones mas grandes de España, llamados "grandes empresarios" iba a conseguir removerles la conciencia, si esa gente no tiene de eso, lo que tenia que haber hecho con ellos en vez de tanta palabreria, es lo mismo que estan haciendo estos con nosotros.
En fin, a pasar estos cuatro años como podamos y a ver si las proximas votaciones volvemos a caer en las mismas fauces.
Estoy de acuerdo contigo, José Ramón, pero también creo que se están superando. El derecho a equivocarse es eso, un derecho y parte de la condición humana, y estoy segura de que muchísimos votantes del PP ahora se echan las manos a la cabeza pero tampoco es cierto que no haya marcha atrás. En principio son cuatro años los que nos toca pasar, pero si la gente está tan harta a los seis meses... ¿tu crees que Rajoy acabará la legislatura? yo tengo mis dudas, cuatro años pueden hacerse muy largos en un entorno de protesta social, y precisamente eso es lo que debemos conseguir.
ResponderEliminarUn abrazo, gracias por tu aportación.
Esta es la verdadera cara del PP.
ResponderEliminar¿algun iluso se creyó alguna vez que iban a mirar por el obrero.poe el trabajador? son lobos con piel de cordero,y la piel ya no la llevan¡claro que ahora en esta situación no la necesitan!ellos y su mayoria.
QUE PENA QUE ASCO.