lunes, 16 de abril de 2012

Un elefante se balancea... sobre la Casa Real



No tenía yo la intención de abrir un blog sobre la Casa Real y sus trapos sucios cuando empecé con Los Días Inciertos. Prometo que no. Pero me encuentro en la tesitura de que Juancar y compañía no me lo podrían poner más fácil para este humilde arte de tocar las narices al personal que se las toca al pueblo, o sea, a mí misma, a nosotros.

Si que fue casualidad, oiga, seguro que el hombre no lo hizo a propósito, pero dejarnos una estampa tan vergonzante como escandalosa en un 14 de abril, no ha podido ser más proclive a la causa republicana. Juancar, nos lo estás poniendo algo fácil ya, ¿no te parece?. ¿Se puede saber que hace éste señor desparramándose por Botswana con la cadera colgando? Pues ni más ni menos que matar elefantes, ahí es nada.

El primer titular que leí sobre el asunto me pareció hasta una broma, pero claro, sigues leyendo y no, no es un chiste, y tienes que creerte por inaudito que parezca que el jefe de Estado de un país que no podría estar más en la cuerda floja -el tuyo- se divierte cazando en África mientras tú te diviertes con el tetris en la cola del paro, o como puedes. A mí que me lo expliquen.

El chiringuito de la Casa Real se viene abajo hace ya tiempo, pero parece que quieren llevarse todas las migajas posibles en su caída, porque esto no es normal. Con o sin invitación, o por muy barato que nos hubiera salido a los contribuyentes, ni gratis me parece tolerable tal actuación. No solo por la imagen de frivolidad a la que ya estamos casi acostumbrados por parte de ésta familia -operaciones de nariz o zapatos de quinientos euros son solo un par de ejemplos- sino por su muy cuestionable escala de valores. Personalmente no entiendo de qué prioridades podemos hablar con respecto a alguien que dice no dormir por las noches por el paro juvenil, pero no dice ni mu cuando se recorta su partida presupuestaria solo un dos por ciento con respecto al más del veinte por ciento en Educación Pública, y que al mismo tiempo anda haciéndose excursiones de lo más exóticas para matar elefantes. A éste hombre habría que exigirle que explique su visión sobre la situación de España y los españoles, así como su aportación a mejorar la situación ¿qué hace exactamente a parte de dar un traspiés detrás de otro -institucional y literalmente hablando-?.

Desde mi punto de vista, lo que hace es reírse en nuestra cara. Teniendo en cuenta que el viaje a Botswana no habría trascendido a los medios de no ser porque el susodicho ha terminado maltrecho -y atendido en clínica privada, para no perder las buenas y caras costumbres de su majestad- todos podemos hacernos una idea de lo bien que se lo pasará fuera de cámaras cuando no nos enteramos de nada. Ahí está la polémica de quien lo paga, porque los hobbies del Borbón son caros: un disparo a un elefante sale por algo más de 30.000 euros, viaje y demás a parte. Si es o no un disparo privadamente financiado es lo de menos, porque no son privados los escoltas, ni el equipo humano que le acompaña, ni probablemente ha volado en aerolíneas regulares. Al final, siempre habremos apoquinado algo, como siempre, y en cualquier caso éste hombre cobra un dineral de dinero público y no debería darse por ético que se lo gaste en éstas excentricidades mientras su país pasa lamentables momentos socioeconómicos. No es ético, ni es justo.

Si ya estaba el hombre y toda su estirpe en unas circunstancias un tanto delicadas de las que se venía culpando a los yernos -el que deja armas a un niño, el que se lleva pasta pública- a ver a quien culpan por ésto, porque ya he leído por ahí que la Casa Real ha confirmado que Rajoy sabía que el Rey estaba en Botswana... Mariano, te quieren cargar el muerto de dar explicaciones, no se cómo lo ves, pero es un buen marrón.

Claro que lo que suele pasar en éstos casos es que nadie dice nada. Dejan que los medios se calmen, como en aquella ocasión del oso borracho ruso, también muy célebre, y siguen adelante con su Estado del abuso, de la injusticia y del viva la Pepa que se traen a costa ya no de nuestro trabajo como era antaño, sino de nuestro sufrimiento y de nuestro Estado de Bienestar en el momento histórico presente. Aunque ahora que lo pienso, no estoy tan segura de que en ésta ocasión se pase todo tan por alto.

Con una imagen más que hostigada en los últimos meses, un comportamiento poco cercano a lo que los españoles entenderíamos como solidario dadas nuestras circunstancias, un veto y obscurantismo casi absoluto a todo lo que sea preguntar sobre la Casa Real en el Parlamento, y tantos y tantos años de vendernos una moto que a la vista está que no funciona... ¿quién sigue creyéndose éstos cuentos ridículos de príncipes y princesas?

El Rey NO mira por los españoles, NO es compatible éste interés con la actitud que muestra. Una persona preocupada por los cinco millones de parados, los miles de desahuciados, los que no tienen dinero para pagar sus facturas, o los usuarios de comedores y dormitorios sociales, NO se va de caza en medio de la tormenta. Tiene al menos el gesto de NO gastarse tal cantidad de dinero tan necesario de forma tan frívola. Un jefe de Estado solidario habría exigido recortar su sueldo mucho más de lo recortado, y nadie le habría dicho que no. Si de verdad le importáramos, no habría guardado silencio ante la demolición de nuestra sanidad pública, de nuestra educación, de todo lo que habíamos conseguido y que ahora nos quitan en su cara sin que diga ni media palabra. Porque no tendrá potestad para legislar, ¿pero es que no tiene boca para hablar y llamar al orden? NO me lo creo más, y nadie debería.

Los intereses de Juan Carlos de Borbón se reducen a Juan Carlos de Borbón. Nada que ver con el pueblo español y sus necesidades. Así que fuera, que se marchen de una santa vez, a Botswana o donde les de la gana, pero que no vuelvan a usurpar el derecho del pueblo a decidir que quien le gobierna no sea heredero de un dictador, ni está por encima de nadie en ningún aspecto que tenga que ver con la justicia, ni se gaste irresponsablemente el dinero que tanto nos cuesta aportar para el bien común, ni haga tantos y tantos agravios en el nombre de España, tan sucio y venido a menos por oportunistas y mangantes.

Ante todos éstos abusos: Tercera República y Poder para el Pueblo.



Bonita semana :)



Alba Sánchez.

3 comentarios:

  1. La adtitud de este señor y todo lo que le rodea es tan anacrónico que no se por donde cogerlo.
    Pero lo que no entiendo y me duele es que no hagamos nada como pueblo para acabar con toda esta sin razón de familia real.Aunque no olvidar que todavia hay quien los sigue,me temo que quienes lo hacen no son desahuciados ni gente de las colas del paro¿me explico bién?

    ResponderEliminar
  2. Pobres habitantes de Bostwana... no les mandes al Borbón pallí!!

    ResponderEliminar
  3. Se le habrá olvidado al Rey que es Rey por la gracia de Dios?

    Y no sabe que ahora Dios es Mesi, y no sabe que Mesi es argentino, y hasta en Argentina le estan dando caña con el famoso elefante

    Habrá cantado alguna vez el Rey la cancion del elefante que se balanceaba sobre la tela de una araña? y como veia que no se rompia llamaba a otro elefante..............

    El que se está balanceandose en la tela de la araña es el, y como hasta ahora no se ha roto, pues ha ido llamando a otros a balancearse, y seguir viviendo todos a costa nuestra, pero creo que la araña ya está hasta las ......narices, por no decir otra cosa, y la tela ya no aguanta mas, y cuando al tela de araña que tienen montada entre todos se rompa, la araña se va a pegar un festin de insectos moscosos y repugnantes, ja ja ja ja ja ja............. y el resto de españolitos a seguir votando al PP y apretandose el cinturón, ji ji ji ji ji...... y la cosa no está para risas, pero tampoco voy a ponerme a llorar

    ResponderEliminar

Gracias por tu opinión